febrero 10, 2009

Kevin (dos realidades y solo un nombre en común.)


(Capítulo 2)

 

 

La jornada en el kinder transcurría sin grandes novedades. En la sala de video se proyectaba una película en la cual un niño soñaba que volaba sobre la vieja Londres montado en su cama. Kevin W. Rush no logró concentrarse en la historia, a pesar que en esa sala había pasado inolvidables momentos viendo a Tom & Jerry, Madagascar, Shrek, El rey león…

Hacía planes para el domingo. La felicidad marcada en su recuerdo a fuego como todo lo que deja el amor se agitaba nuevamente en su espíritu como en tiempos muy lejanos que, en su mente infantil, se le antojaban tan lejanos como de otra vida.

El carnaval chino del año pasado, en medio de calles y árboles nevados, y un lago interminable donde navegaban grandes cascarones de hielo poblados de pájaros, se le presentaban en una sucesión de imágenes llenas de magia y colores exquisitamente combinados con destellos de sol y ruidosa pirotecnia. Soñaba entre cubos de plástico, almohadones y juguetes abandonados al asar por los pasillos con los ratos en que su padre jugaba con él sin mirar el reloj ni atender el teléfono móvil.

Personajes extraños andaban en derredor sobre largos zancos regalando sonrisas y golosinas, y dibujando estrellas imaginarias en el aire con  cuatro pelotas verdes.

 

 

Las cuatro pelotas verdes cayeron desparramadas, como abatidas bajo el peso del bochorno de la siesta santafesina y nuevamente la nube de polvo y humo de los motores acelerando abrumó los ojitos rasgados y renegridos de Kevin Ochóa, arrancándoles lágrimas, ya de irritación… ya de desolación.

Pablo se puso de rodillas y se inclinó para que María le aliviara los hombros, muy doloridos por la tediosa faena de actuar cada tres minutos frente a un público excesivamente exigente… u oprobiosamente indiferente.

Sus angustiosos pasos buscaron la sombra piadosa de unos viejos paraísos de hojas amarillentas mientras su madre contaba unas pocas monedas, parada entre los carriles casi despoblados de tránsito. El niño, abatido por el cansancio y el hambre, la mejilla sobre el pasto chamuscado, observaba  su figura deformándose en el aire recalentado, mientras caía en una especie de narcótica adormidera.

El sol a plomo y la hora del descanso reunió a la familia bajo esa benigna sombra que atenuaba apenas el azote de un verano seco e inclemente.

Como un sagrado grial de vida en medio de los cuatro se erguía una botella de agua mineral que alguien, desde el interior refrigerado de un coche, les había regalado a cambio de las tan preciadas limosnas, magro óvolo obtenido con el sacrificio de actuar, agradar y sonreír… sonreír aunque nadie se haga dueño de esos actos desesperados y pague el valor real de tan titánica lucha.

No hay para comer mas que algunas frutas, magreadas por el trajín, el sol abrasador y la putrefacción.

Kevin se dormía sin soltar el paquete de facturas con crema, como para acortar la espera de la hora del retorno y nuevamente se halló frente a la luz de cinco velas azules que destellan en su honor sobre una enorme torta… nuevamente la saliva con sabor a chocolate desbordó su boquita abandonada al asedio de las moscas. Ilusionado imaginaba el reencuentro con su padre el domingo en el penal, ansioso por contarle que cuando sea grande iba a ser un exitoso malabarista y que, con un año mas cumplido hoy, ya estaba más cerca de serlo.

Miles de automóviles, camiones y ómnibus llenos de espectadores se acercaban a ver su actuación, y al final, una montaña de monedas muy nuevas… muy brillantes era puesta voluptuosamente a sus pies.

Vio a su madre resplandeciente, vestida como una reina, con una corona revestida de monedas doradas y plateadas de un peso y de cincuenta centavos. Un collar hecho de monedas de diez centavos rodeaba varias veces su cuello. Pulseras y brazaletes exquisitamente bordeados con monedas de cinco centavos, muy lustradas, adornaban sus brazos y, engalanando sus manos, varios anillos coronados con relucientes monedas de veinticinco centavos.

El trono se alzaba al pie de un enorme y frondoso paraíso reverdecido, tachonado de florcitas celestes, y circundado por miles de blancas mariposas en danza.

La gente descendía de los vehículos dando vivas y alzándolo en andas, ofreciéndole heladas y cristalinas botellas de agua mineral mientras Pablo y María recogían el tesoro y lo ponían en limpios y flamantes contenedores de basura del mercado.

 

 

La tarde se precipita serena y silenciosa anunciando una noche temprana y helada sobre los rascacielos de la isla de Manhattan.

Por entre las imponentes moles de acero y cemento se cuelan juguetones rayos de sol que componen una dorada coreografía, chocando y desviándose en los cristales en fantástico artificio de luz.

Kevin W. Rush desciende del automóvil y llega brincando hasta los brazos de su madre, que lo abraza y besa tiernamente, descolgándole la mochila entre sonrisas y caricias.

-¡El domingo iremos con papá al carnaval chino, y ha prometido comprarme un papalote de caña y papel de colores!- Es la noticia mas importante del día para el niño. Sin embargo su madre, en ausente actitud, sienta a Kevin a la mesa donde un humeante plato de pasta y un vaso de jugo de naranjas recién exprimidas le anuncian que nuevamente cenará solo.

En la televisión se comenta la reunión de dirigentes y ejecutivos del FMI con una delegación argentina encabezada por su presidenta para acordar los detalles de la liquidación total de la deuda.

El niño no se molestó en cambiar de canal ni en buscar a su padre entre los asistentes a la junta. Ese era un hecho demasiado corriente y sus pensamientos volaban hasta el domingo entrante… tan trascendente y extraordinario.

Una mirada al vacío y una sonrisa de placer acompañaban sus pensamientos mientras saboreaba la cena.

Contrariamente a lo cotidiano, y ante las preguntas de su madre, no recordaba nada de lo que hizo hoy en el kinder.

Ella lo miraba con extrañeza mientras abría el cuaderno. El niño sabía que esta noche no vería a su padre, que seguramente llegará muy entrada la noche, lo cual le daba un poco de nostalgia pero, a los cinco años, esas sensaciones no duran ni lastiman demasiado cuando desde el interior bulle otra fuerza incontenible que lo llena de alegría e ilusiones.

Sueña despierto con una carrera alocada sobre el pasto nevado para poner a volar un enorme papalote chino de bellos colores y su padre, alentándolo a que no deje de correr hasta conseguirlo…

 

 

Kevin Ochóa despertó en soledad, con el cuerpo dolorido al cabo de varias horas de estar inmóvil en el suelo.

Varios minutos pasaron antes de que cayera en la cuenta de que no hay tesoros, ni corona, ni trono alguno… solo hambre, dolor y cansancio.

Casi rompía en llanto cuando su hermana maría se acercó corriendo y le ofreció un caramelo.

Medio abrumado aún y con los ojos anegados de llanto, el niño tomó el obsequio mientras su madre y su hermano se sumaban al agasajo batiendo palmas y cantando por su cumpleaños.

Sintió que su alma retornaba a su cuerpecito lánguido y entumecido.

La sequedad de su boca tornó a una catarata de saliva mientras desgarraba el envoltorio pegajoso, no con poco trabajo ante la resistencia terca del papel, que dilataba aquel estado de éxtasis que precede al placer de un bocado dulce cuando el hambre avasalla. También fue cediendo ese ahogo que en su garganta provocaba la angustia del desamparo en momentos de despertar y no hallar a nadie cerca.

Una veintena de funciones más debieron actuar sus hermanos mientras él, de la mano de su madre, extendía sus palmas anhelantes hacia el cielo como en súplica, ante las ventanillas de los vehículos que, las mas de las veces ni se abrían… y peor aún… si estaban abiertas, se cerraban ante su miserable e insignificante presencia.

El día de trabajo iba llegando a su fin y Kevin Ochóa ya pensaba en el penoso camino de regreso, internándose con su familia en la oscuridad y la incertidumbre que da la pobreza extrema… sus pies descalzos, y las pocas monedas… y la terrible certeza de que no habrá torta de chocolate ni velas azules ésta noche, y que mañana será igual… terriblemente igual.

Pablo cae abatido por la fatiga junto a él y la pequeña maría junta con el último aliento las pelotas de tenis y mira a su madre, que llora a un lado del camino… llora amargamente mientras cuenta las monedas.

 

 

(continuará)

febrero 09, 2009

Año 1, Nº 4
09/02/2009


Kevin

(Dos realidades y solo un nombre en común.)

(Capítulo 1)

 

Es una mañana muy fría en el elegante Murray Hill, en el distrito de Manhattan, que está ubicado al este del Midtown. Es un lugar bastante acogedor, con parques a lo largo del East River y con gran diversidad gastronómica, como por ejemplo el "Curry-in-a-Hurry", dedicado en exclusiva a comida hindú, o el "Paddy Macquire's", especializado en comida árabe. Asimismo es un buen lugar para visitar y para ir de copas, a lo largo de la Tercera Avenida.

Son las 06.00 de la mañana y Kevin Walter Rich ya está desayunando. En media hora estará camino al kinder. Los llevará el chofer, ya que su padre tiene una reunión de negocios y le queda de paso. La leche caliente, el cereal crocante, el jamón y el pan tostado, las galletas con fruta seca…todo huele delicioso… pero es lo de todos los días, y a sus 5 años, sabe que no tiene mucho para elegir, de modo que come de buena gana y fantasea con las calles nevadas y la compañía poco usual de su papá camino al kinder. Eso sí que no ocurre todos los días.

Aún las luces de la calle alumbraban el gris de la madrugada Neoyorkina y al frente de una pequeña y viva nube de vapor se acerca el auto de su padre para recogerlo en el portal de su casa. Besó a su joven madre y saltó al amplio asiento trasero mientras se calaba su gorro de abrigo sobre las orejas.

 

Kevin Ochóa cumple 5 años hoy y su inocencia, (algo velada pero aún capaz de llevarlo a volar un poco) juega con el sueño de una torta de chocolate con 5 velas azules. Lo piensa y se le llena la boca de una tibia y profusa saliva que acaso… sabe a chocolate, y desborda las comisuras de su boquita entreabierta y maldentada,.

Son las 9.00 y hace una eternidad que se levantó, y hace un siglo que viene caminando de la mano de su madre, dando tropiezos por momentos dolorosos con sus piecitos descalzos y mugrientos por el borde de una milkilométrica avenida llamada Teniente Losa.

El sol ya pega fuerte en San Agustín pero, igual camina, porque es mas grata esta rutina en verano que en invierno.

Su barriga habla un idioma sordo, pero bien comprensible. Es la hora del desayuno para él… lo de siempre… lo de todos los días. En esa parte del periplo hasta Blas Parera  están los contenedores del mercado concentrador de frutas y hortalizas. Allí es donde termina todo lo que no se vende y allí es donde Kevin Ochoa es subido por su madre para seleccionar el desayuno de la familia, ya que con ellos hoy –y esto no ocurre todos los días- van sus dos hermanos mayores, María, de 7 años y Pablo, de 9, a quienes la policía corrió ayer de Boulevard Pellegrini y Urquiza porque hacían piruetas y pedían monedas a los conductores que paraban en el semáforo. Molestaban…

Sus manitas revuelven entre un enjambre de moscas y va encontrando las manzanas, naranjas, algunas ennegrecidas bananas, una calabaza medio podrida, varias papas para el almuerzo, dos tomates que chorrean jugo hasta sus codos, y la sorpresa del día!... un paquete con 4 facturas con crema que deben tener apenas dos o tres días. –¡Para mi cumpleaños!-pensó.

No hay tiempo para parar, porque hay que juntar monedas en el semáforo para ir a ver a papá, que hace un año está en LAS FLORES por romper una puerta y entrar de noche a un supermercado para robar un cajón de pollos, dos porrones y varias latas de duraznos.

Comen mientras caminan, separando con los dedos las partes podridas de las frutas y  espantando a manotazos las moscas que, con el calor de la mañana se han puesto muy molestas.

 

Kevin Walter Rich abraza y besa a su padre antes de entrar a la escuela con su mochila grande … muy colorida y su abrigo de piel.

Mientras el Buik oscuro se aleja como navegando por una muy nevada Tercera avenida hacia el Financial District, el niño se quita el guante y saluda desde la escalinata lleno de ilusiones, pues le ha hecho prometer a papá que irían al Central Park éste fin de semana a presenciar un desfile del carnaval chino. El papá de Kevin es un hombre muy ocupado en negocios junto a sus amigos. Esta mañana le oyó en una conversación telefónica en la que le anunciaban una reunión con una señora llamada Cristina, con quien debían tratar el pago de, quien sabe que deuda externa de que país.

Al niño solo le preocupaba la aventura del próximo fin de semana con mamá y papá, pero los saludos de sus compañeros de clase lo sacaron, mas temprano que tarde, del mágico éxtasis en le que había caído.

El frío de la calle en contraste con la calefacción de la sala de juegos puso rubor a las mejillas pálidas de Kevin W. Rich. Un detalle que observó su maestra al abrazarlo y besarlo… un detalle que sumado al celeste clarísimo de sus enormes y muy abiertos ojos alemanes, y esa sonrisa llena de esperanza daban al niño un aura angelical.

 

Arrastrando sus piecitos cansados, Kevin Ochóa, su madre y sus hermanos llegan al semáforo de Blas Parera. Casi de inmediato el niño recibe la primera gran sorpresa de cumpleaños… un hecho maravilloso al cual jamás había asistido y que observó alelado, incrédulo, extasiado... Pablo cargó en sus hombros a la menuda María ante la primera luz roja, se detuvo tambaleando frente a los camiones y automóviles y el show comenzó. Cuatro pelotas de tenis pasaron como volando de arriba hacia abajo y de abajo hacia arriba de manera mágica entre las manos de los dos. Pablo desde abajo y María desde los hombros de Pablo terminaron la función y reverenciaron con los brazos abiertos mientras Kevin Ochóa, de la mano de su madre recorría las ventanillas con la mano extendida, tal como le habían enseñado la noche anterior, pero sin poder dejar de mirar los detalles del espectáculo.

Nada de lo poco o mucho que había visto en su corta y miserable existencia, le había dado un sacudón espiritual tan fuerte. Sus hermanos se confirmaban como sus héroes… eso es lo que el niño sentía y, sin lugar a dudas, había hallado el camino de su porvenir.

- Cuando sea grande, quiero ser malabarista como mis hermanos_ le dijo a su madre con los ojitos llenos de luz… su madre se limitó a acariciarle las crenchas sucias con una mueca indefinida en su rostro ajado, lo tomó de la mano y la función recomenzó.

          

 

(Continuará)

febrero 08, 2009

Mueren por miles al año tras el sueño americano

Año 1, Nº3

Domingo 8 de febrero de 2008


Mueren más de 400 emigrantes mexicanos al intentar cruzar a EU.

 

El año pasado más de 400 emigrantes mexicanos fallecieron al intentar cruzar a Estados Unidos, debido al recrudecimiento de las políticas antiinmigrantes de esa nación y la falta de creación de empleos en zonas rurales y urbanas de México.

México DF, 03 Enero 2007 (Notimex). La fracción del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la Cámara de Diputados señaló que "hay un panorama desolador para los paisanos y emigrantes, porque hay una ofensiva de deportaciones masivas y avanza la construcción del nuevo muro fronterizo".

Además, "en México el gobierno recorta recursos y programas para la atención de ese sector de la población que aportó en 2006 más de 20 mil millones de dólares en remesas", comentó.

El coordinador del Grupo de Trabajo de Migración del PRI, Edmundo Ramírez Martínez, dijo que la cifra de mexicanos muertos asciende a más de 400, oficialmente, pero hay otra "negra" de decenas de emigrantes que mueren en el desierto y que no han sido encontrados y en ocasiones se sepultan en calidad de desconocidos.

Reveló que tan sólo en el río Bravo y de acuerdo con el Centro de Estudios Fronterizos y de Promoción de los Derechos Humanos (Cefprodhac), con sede en Reynosa, Tamaulipas, del 1 de enero al 30 de noviembre de 2006 murieron 77 mexicanos ahogados en ese cauce fronterizo.

En entrevista en la Cámara de Diputados, el legislador federal por el estado de Hidalgo lamentó que frente a esa situación no exista algún programa de empleo emergente en zonas expulsoras de mano de obra en el país.

Por el contrario fue "propuesto y aprobado en el Presupuesto de Egresos de la Federación una disminución de más de cinco por ciento a los programas de defensa, apoyo jurídico e incluso para la repatriación de cadáveres de paisanos que fallecen en Estados Unidos", dijo.

Alertó que en Estados Unidos se inició a finales de 2006 una nueva "ofensiva" contra los inmigantes mexicanos, ello con un operativo en los estados de Colorado, Nebraska, Texas, Utah, Iowa y Minnesota, en empacadoras de carne, bajo el pretexto de una
investigación sobre el "robo de identidad".

"En el fondo lo que busca es concretar redadas masivas de migrantes. Las autoridades estadounidenses dijeron que se trataba de una gran ofensiva contra el robo de identidad, pero en realidad fue la mayor redada contra inmigrantes indocumentados. En ese operativo mientras laboraban, fueron detenidos mil 282 migrantes Indocumentados, entre ellos 600 mexicanos", precisó .

Ramírez Martínez indicó que a ello se agrega la deficiente asistencia jurídica a los mexicanos que tienen que enfrentar a la justicia estadounidense.

El secretario de la Comisión de Población, Fronteras y Asuntos Fronterizos añadió que a mediados del año pasado existían más de 35 mil mexicanos presos en cárceles federales de Estados Unidos y no se ha informado qué clase de apoyos se les ha brindado y el estado que guarda cada uno de los expedientes.

Fuente:    http://www.eluniversal.com.mx/notas/564160.html




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El flujo de inmigrantes cubanos está llegando a un nivel histórico.

El número de interceptaciones en el Estrecho de
la Florida pronto pudiera igualar o exceder el del 2005, cuando la Guardia Costera de EEUU hizo el mayor número de intercepciones desde la crisis de los balseros de hace 13 años. Para el miércoles, el número de emigrantes cubanos detenido por la Guardia Costera era de 2,938, 14 menos de la marca del 2005.

Aunque no hay ningún éxodo masivo a la vista, el aumento en el número de interceptaciones es parte de un creciente número de cubanos que están huyendo de la isla rumbo a Estados Unidos, en barcos, aviones, automóviles o a pie a través de la frontera entre México y Estados Unidos.

En realidad, por lo menos 3,437 más cubanos dejaron la isla comunista y llegaron a EEUU entre octubre del 2006 y septiembre del 2007, que durante los 12 meses anteriores, lo que hizo que algunos analistas se preguntaran si se estaría gestando alguna crisis migratoria.

El miércoles, los Servicios de Ciudadanía e Inmigración de EEUU anunciaron un nuevo programa de visas condicionales para los cubanos de la isla que estuvieran esperando visas, en parte para tratar de frenar el creciente flujo migratorio. Los cubanos que han estado esperando por la aprobación de sus visas, pero no las hayan recibido, serán elegibles para recibir los nuevos documentos, que se van a emitir rápidamente.

Recientemente, los expertos en el Instituto de Estudios Cubanos y Cubano-Americanos de
la Universidad de Miami compilaron un informe que muestra que en los dos últimos años fiscales, han llegado más cubanos que durante toda la crisis de los balseros, que trajo 37,191 inmmigrantes, y que en los últimos siete años han llegado más cubanos que durante los éxodos combinados de los balseros y el Mariel.

''La llegada de decenas, sino cientos, de miles de cubanos en un breve período de tiempo es un cuadro que cualquier gobierno de EEUU quisiera evitar a toda costa'', dijo el informe.

``Sin embargo, de manera callada pero crecientemente evidente, pudiera haber en progreso una nueva emigración de masas proveniente de
la Cuba de Castro''.

Otros observadores, sin embargo, no están convencidos.

''No puedo encontrar nada estadísticamente significativo en que mil o dos mil, o cinco mil, cubanos más sean interceptados o lleguen'', dijo Phil Peters, vicepresidente del Instituto Lexington en Arlington, Va., que se especializa en asuntos cubanos y apoya el levantamiento de las limitaciones a los viajes a Cuba.

``No es ningún secreto que mucha gente quiere salir de Cuba pero eso no significa que sea inminente una crisis migratoria. No se puede inferir un estado de ánimo de combinar cifras provenientes de diferentes categorías de inmigrantes. Lo que está sucediendo es normal''.

Algunos de los recién llegados dicen haberse ido debido a la incertidumbre sobre el futuro, incrementada por la enfermedad de Fidel Castro.

'La gente quiere cambio, que haya democracia pero nada parece cambiar', dijo William Mujica, de 33 años. ``Hay incertidumbre''.

Mujica, que llegó por la frontera mexicana, estaba recogiendo un permiso de trabajo en la oficina de Servicios Legales de las Caridades Católicas de
la Archidiócesis de Miami.

Randolph McGrorty, el director ejecutivo de la agencia, dijo que la mitad de los cubanos que su oficina ayuda ha llegado vía México.

''Desde hace cuatro o cinco años, la tendencia es hacia inmigrantes que vienen a través de la frontera'', dijo. ``Eso se ha mantenido muy estable''.

Mujica, que vino a través de la frontera hace más de cinco meses, se fue de Cuba en una balsa llegando a
la Península de Yucatán y, de ahí, a la frontera con EEUU. Las cifras de Aduanas y Protección de Fronteras muestran que la mayoría de los cubanos ahora llegan de México.

Según el estudio de
la UM, entre octubre del 2005 y septiembre del 2007, casi 77,000 cubanos llegaron a territorio americano, más del doble de los que llegaron durante la crisis de los balseros de 1994.

El reporte de
la UM observa que en los últimos siete años han llegado más cubanos que durante el el éxodo combinado del Mariel de 1980 y de los balseros de 1994: 191,000 desde el 2,000 versus 162,191.

Sin embargo, los totales del reporte de
la UM también incluyen a los cubanos han llegado legalmente bajo un acuerdo migratorio con Cuba de 1995.

Los totales también incluyen a los que todos los años reciben residencias permanentes bajo
la Ley de Ajuste Cubano. Esos incluyen a los cubanos que han llegado legalmente de Cuba con visas o ilegalmente por aire, mar o tierra a través de terceros países como México o Canadá.

Bajo el acuerdo migratorio Cuba-EEUU, se supone que Estados Unidos conceda por lo menos 20,000 visas anuales en
La Habana. Ese número, sin embargo, frecuentemente se queda corto, lo que lleva a reciminaciones de La Habana.

Recientemen
te, los gobiernos han intercambiado acusaciones sobre quien tiene la culpa por el déficit de visas de este año. El miércoles, cuando los Servicios de Ciudadanía e Inmigración revelaron el nuevo programa de visascondicionales, funcionarios dijeron que desde mediados de noviembre por lo menos 13,000 cubanos que tenían aprobadas sus peticiones todavía estaban esperando visas.

Jaime Suchlicki, director del Instituto de
la UM que compiló el reciente reporte de inmigración, dijo que el aumento de las llegadas refleja una creciente ''desilusión'' con el régimen cubano.

''Creen que Cuba no va a cambiar rápidamente y que la economía cubana no va a mejorar muy rápidamente'', dijo Suchlicki. ``Un refugiado recién llegado nos dijo, `Hemos pasado 47 años tratando de construir el socialismo así que no queremos construir nada nuevo otra vez. Queremos ir a una sociedad donde ya todo esté construido''.

La mayoría de los que cruzan la frontera llegan a México tras llegar en embarcación a
la Península de Yucatán. Y el creciente tráfico a través del Canal de Yucatán parece ser el resultado del reforzamiento de la vigilancia de la Guardia Costera en el estrecho de la Florida. Los funcionarios americanos responsabilizan a los contrabandistas por gran parte del tráfico migratorio hacia el sur de la Florida.

(Bajo
la nueva política de pies secos/mojados que sólo se aplica a los cubanos, generalmente se permite que los que llegan a las costas de 2EEUU puedan quedarse mientras que los que son capturados en el mar son devueltos a la isla. A los que llegan por la frontera generalmente se les permite quedarse en el país.)

Cuba ha exhortado a México a frenar el flujo migratorio que llega a Cancún e Isla Mujeres.

Manuel Aguilera de
la Paz, el embajador cubano en México, le dijo recientemente a los reporteros en la capital mexicana que el aumento en el número de emigrantes cubanos requiere un nuevo acuerdo migratorio entre México y Cuba.

 

Fuente:   http://foros.elpais.com/lofiversion/index.php/t10049.html

 

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Pregunto desde el carajo:

 

¿Puede alguien explicarme por qué estas diferencias con extranjeros indocumentados de Latinoamérica?

¿Alguien podría explicarme por que un mexicano que cruza a gatas, jugándose el pellejo y con la muerte mordiéndole los talones, el desierto fronterizo en busca de lo mismo que busca un balsero cubano es “un maldito ilegal”, mientras el balsero cubano es “un refugiado”?

¿Con qué argumento puede alguien justificar éste trato diferencial hacia seres humanos hambrientos y desamparados de países del mismo continente, lengua, religión, y capacidad de trabajo?

¿Puede algún lector esclarecerme sobre las razones de status sociales tan diferentes, asignados a gente de tan parecidas etnias, que buscan trabajo y bienestar para ayudar a sus congéneres, y darles un futuro mas promisorio a costa de desempeñar roles que la sociedad imperialista desprecia por indignos?

¿Acaso me van a negar que se trata de una vieja y sucia maniobra de la política internacional de EEUU para convencer a los que se quedan en Cuba que los que se van están mejor bajo el régimen capitalista norteamericano?

No creo ser el primero en observar tal hijaputéz, pero los cubanos exiliados, ¿negarían éstas realidades tan disímiles?

¿Los habrán convencido que un cubano es mejor persona que un mexicano en igualdad de condiciones sociales, culturales, físicas, idiomáticas, económicas, etc., etc.?

 

Usted, cubano de Miami… ¿Se cree superior a un mexicano?

Si se va al carajo tal vez se desengañe viendo la realidad desde otro punto de vista.

¡Venga!... Lo invito.

 

 

Oscar Alberto Rey Cardamone

Santa Fe, Argentina

Verano de 2009

febrero 07, 2009

"La humanida está necesitando agua"

Año 1,  Nº 2,

 6 de febrero de 2009

Escribe: Oscar Alberto Rey Cardamone

 

“La humanidad está necesitando agua”


 

         España ocupa la quinta posición a escala mundial en cuanto a "huella hídrica", variable que analiza el volumen de agua dulce usada globalmente para producir los bienes y servicios consumidos por cada ciudadano.
         Nuestro país, además, forma parte del grupo de Estados del Mediterráneo (Grecia, Italia, Portugal y Chipre) que tiene cada vez un mayor estrés hídrico, una situación en la que el agua empieza a ser un bien escaso al ser más importante la demanda que la cantidad disponible.
          Así se desprende del Informe Planeta Vivo 2008 de WWF/Adena, elaborado en colaboración con la Sociedad Zoológica de Londres y la Red de la Huella Global, y que ha sido presentado simultáneamente en varias ciudades europeas.
          El documento advierte de que el planeta se enfrenta a una recesión ecológica, ya que la "huella ecológica" -indicador que estima la cantidad de recursos naturales necesarios para sostener el nivel de consumo de una sociedad y asimilar sus desechos- excede la capacidad de regeneración de la Tierra en un 30 por ciento.
          Concluye que más de las tres cuartas partes de la población mundial vive en países "deudores ecológicos", en los que su consumo nacional ha excedido su propia biocapacidad.
           De esta forma, una gran mayoría de los ciudadanos están manteniendo estilos de vida y crecimiento económico utilizando el capital ecológico de otras partes del mundo.
           Los países con mayor huella ecológica son Estados Unidos y China, ya que cada uno de ellos utiliza cerca del 21 por ciento de la biocapacidad del planeta.
           España ocupa la posición número duodécima a escala mundial y tiene un déficit ecológico del 338 por ciento, lo que significa que necesitaríamos casi 3,5 países más para mantener nuestras actuales demandas.
           Además de la "huella ecológica", el informe incluye por primera vez datos sobre la "huella hídrica", un indicador que muestra, por ejemplo, la importancia del agua utilizada como materia prima en la fabricación de una camiseta de algodón (2.900 litros) y que permite medir el impacto en las reservas mundiales de agua.
           Cada persona gasta una media de 1,24 millones de litros de agua cada año (aproximadamente la mitad de una piscina olímpica) y el informe advierte de que unos 50 países están sufriendo actualmente "un estrés hídrico severo", una situación que aumentará a consecuencia del cambio climático.
           Por otro lado, el Índice Planeta Vivo, medida obtenida del estudio de la evolución de 5.000 poblaciones de 1.886 especies, ha descendido un 30 por ciento desde 1970, debido, principalmente, a la deforestación y la transformación de los usos del suelo en los trópicos, aunque también al cambio climático.
           El documento, una radiografía de la salud de nuestro planeta, subraya que el gasto "imprudente" de los recursos naturales "está agotando el capital natural del mundo hasta un punto en el que estamos amenazando nuestra prosperidad futura".
           Según el informe, "si nuestras demandas sobre el planeta continúan a este ritmo, a mediados de la década del 2030 necesitaremos el equivalente a dos planetas para mantener nuestros estilos de vida".
           A pesar de este panorama sombrío, el informe considera que "no es demasiado tarde para impedir una recesión ecológica irreversible y, por ello, incorpora una serie de soluciones clave, llamadas "cuñas de sostenibilidad", para abordar los excesos ecológicos que provocan los diferentes sectores y amenazas.
           En cuanto al reto que representa el cambio climático, el documento muestra que la eficiencia energética, las energías renovables y la disminución de emisiones podrían satisfacer las demandas energéticas para el año 2050. EFE

El informe Planeta Vivo 2008 en español se puede descargar en:
http://www.wwf.es/noticias/sala_de_prensa/index.cfm?uNewsID=6500

 

Desde el carajo digo:

 

             “Alrededor de 2030 necesitaremos el equivalente a dos planetas para mantener NUESTRO estilo de vida” (sic).

             Si tenemos en cuenta que éste artículo fue escrito por alguien en el viejo mundo al menos nos ha dejado el consuelo de reconocer implícitamente que nosotros, aquí en nuestra australidad, no estamos incluidos en esos estándares de vida.

              No se me interprete como un PILATO de la modernidad (entre otras cosas porque no considero lavarme las manos hasta dentro de un buen rato, en parte porque estoy escribiendo y en parte para no desperdiciar tanta agua).

              La cosa es que mientras ellos gastan 1.24 millones de litros por año y por habitante, nosotros, los supuestos dueños del acuífero Guaraní, solo consumimos 164.250 litros por habitante en el año, aunque si tomamos en cuenta que el informe de ASSA de los últimos días habla de éste consumo con alrededor de 40º centígrados de temperatura ambiente en el conglomerado Santa Fe, podríamos inferir que dicha cifra es todavía  menor.

http://www.argentinamunicipal.com.ar/despachos.asp?cod_Des=5369&id_seccion=62

 

De todas maneras, nuestros hábitos de consumo y nuestro sistema de reparto de estos bienes sociales son tanto o más injustos que lo que se observa en el mundo.

El fenómeno llamado “La niña” viene asolando nuestros territorios con inundaciones puntuales en ciertas provincias del NOA a la par de una sequía pocas veces vista en la historia que abarca la pampa gringa, la cuñas boscosa, las llanuras de la pampa húmeda, la precordillera y la sabana y selva subtropical.

Se ha agudizado pues, la ya sensible carencia de agua dulce en zonas más pobres, sea para consumo humano como para el de la hacienda, la cual termina sucumbiendo por falta también de pasturas, consecuencia de la falta de lluvias estacionales.

Lejos de hacernos eco debidamente de tales realidades, solo apelamos aisladamente a recolectar algunas botellas de agua mineral y enviarlas a través de alguna campaña de ONGs, en pos de aliviar con muy poco nuestro espíritu solidario antes que solucionar un problema a mediano o largo plazo.

Las concentraciones de cianuro de potasio, plomo, cobalto y otros metales pesados (producto de la disminución de caudal) en yacimientos freáticos del Chaco argentino han aumentado los estragos en las poblaciones de ganado de cría, aumentando la zozobra de pequeñas y medianas explotaciones agropecuarias y afectando con esto las economías regionales que han sostenido históricamente a pueblos y ciudades pequeñas de la región.

El panorama es sombrío en el mediano plazo, dado que si las lluvias llegaran hoy a aliviar ésta cadena de desgracias y siguiera todo dentro de una relativa normalidad, no se esperaría una recuperación plena antes de un par de décadas.

Mientras tanto en los grandes conglomerados urbanos, pierden auge las campañas solidarias para acopiar agua potable e ir en ayuda de tantos argentinos que envenenan su sangre bebiendo agua de pozo contaminada a cielo abierto por la minería salvaje, nacida de los brutales negociados del genocida Menem y sus secuaces en los `90.

No ha estado el estado a la altura de las circunstancias (como siempre) implementando medidas paliativas y –sano es recordarlo- tampoco ha contribuido con la obra pública en medida suficiente para prevenir las consecuencias de éstos desastres.

Recursos valiosísimos para ésta hora han sido dilapidados en salvatajes empresariales ligados estrechamente al poder. Salvatajes igual de fraudulentos han beneficiado a banqueros extranjeros y, como si fuera una sobra, se le ha dado al FMI una suculenta tajada de nuestro PBI para saldar una no menos fraudulenta deuda, contraída por unos pocos invisibles e intocables y pagadera con la sangre, el sudor y la vida de muchos compatriotas.

La salud pública se negocia en un sucio mercadeo donde unos pocos pretenden conseguir los favores de otros pocos para perpetuarse en un malsano poder, que hunde sus bases en una tierra devastada y sin futuro

La parte mas triste de la historia hablará de un pueblo bajo los efectos de una anestesia política e institucional que no le permitió siquiera el sueño de torcer el destino a favor de una conciencia mas solidaria que dejar dos litros de agua mineral en un camión y sentir que con eso, ya cumplimos.

Las dosis diarias de esa anestesia son inoculadas desde la televisión cada día, a cada momento… todo el tiempo.

 

 

¿Y si nos vamos todos al carajo?

 (Fuente:  http://www.losverdesdemadrid.org/web.php?ver=noticias_ampliar&id=2608&titulo=El%20consumo%20de%20agua%20por%20habitante%20sit%C3%BAa%20a%20Espa%C3%B1a%20en%20el%20quinto%20lugar%20del%20mundo)

Santa Fe, Argentina

Verano de 2009-02-07

Oscar Alberto Rey Cardamone

febrero 05, 2009

"Quiero que me manden al carajo"

 

Año 1,  Nº 1,

 5 de febrero de 2009

Escribe: Oscar Alberto Rey Cardamone

 sieteestrofas@gmail.com

“Quiero que me manden al carajo”

 

¿Quien no ha sido enviado alguna vez al carajo por alguna razón o en una circunstancia más o menos enojosa o jocosa?

A mi me ha pasado infinidad de veces pero, en ese momento en que una reacción acorde a la situación debiera aflorar de inmediato, a mi me  da por quedarme en silencio y reflexionar sobre lo que puedo ver más allá del horizonte que dominamos junto a mi interlocutor -que generalmente se queda mirándome a la espera de aquella reacción- aquí, en cubierta y pienso- o le digo-- SI. Será mejor que me vaya al carajo y desde allí intente dirimir el pleito con una visión más amplia de las cosas.

Si bien se dice que el hecho de ser enviado al carajo constituía, en tiempos de épicos exploradores de los anchos mares, un castigo poco menos que humillante, me animo a desafiar esa creencia.

Va el argumento: Con sentido práctico y saliendo por la tangente del contenido puramente alegórico de mi nota de hoy, me he puesto a pensar que si aquellos pioneros, viejos héroes de tiempos de conquistas de lo desconocido, eran capaces de dejarlo todo en aras de la aventura, un fuerte deseo de ser los primeros era el impulso vivaz que los movía, que los llevaba a embarcarse en lo que podía llegar a ser su último viaje, generalmente sin lo mínimo necesario, limitados en vituallas, agua potable, medicamentos para tratar males desconocidos, en frágiles, incómodas y desvencijadas naves, con apenas una rudimentaria brújula, un cielo estrellado que no siempre estaba visible para orientarlos y… ¡SIN MAPAS!... porque además tenían que arreglárselas para trazarlos según fueran descubriendo nuevos rincones en el planeta.

Creo que la posesión de un inquebrantable espíritu aventurero y una fe mística en Dios y la suerte en aquellos hombres, no soportaba el mínimo cuestionamiento.

Se hablará de condenados a muerte, desahuciados, delincuentes, viciosos, apestados, desquiciados… siguen siendo aventureros para mi modo de ver. Soñadores de un mundo nuevo y tal vez mejor que el conocido hasta entonces, a pesar de las prometidas veleidades e incalculables riquezas que les esperaban según dudosas o míticas crónicas alguna vez escritas quien sabe por quien.

Un ser que, tras tales ideales ha sido capaz de ofrecer su vida sin titubear, aún cuando la vida era, es y seguirá siendo siempre el tesoro más preciado que puede poseerse, sin dudas no se habría enojado por tan poco, en todo caso.

Mal podemos entonces creer que un hombre de tal rusticidad y apego a las utopías pudiera renegar del privilegio de dominar  con la vista desde el carajo unas cuantas millas más de mar a la redonda, más allá del horizonte que, sin dudas, se veía más limitado desde la cubierta.

Pregúntese Usted, estimado lector, ¿Qué tormenta, chubasco, maremoto, calma chicha, ventolera o sol rajante podía entonces amilanar a ese hombre, a cambio de la gloria de ser el primero en anunciar las buenas o malas noticias desde el carajo, manejando con su viva voz los destinos de los habitantes de ese microuniverso que desde allí se extendía brevemente a sus pies en medio de la oscura inmensidad?

Imagínese Usted, amigo mío, como desde el cielo, apreciando la vastedad que lo circunda y anunciando borrascas atronadoras, mar en calma, un iceberg a estribor, ¡¡¡tierraaaaa!!!... ¡¡¡piraaaataaaas!!!... y todo para prevenir a los de abajo y que obren  en consecuencia.

Ser el primero en percibir el desesperado pedido de socorro de un náufrago y poner proa en su ayuda, u orientar al timonel para no encallar entre bancos de coral o aguas poco profundas… descubrir a las aves que anuncian la proximidad de la costa, u oler en la brisa la vegetación agreste de una isla salvadora en medio de la nada.

No creo entonces que ese aventurero nato, pletórico su corazón de curiosidad y fantasías, haya sido capaz de despreciar tan sublime oportunidad de descubrir posiblemente un paraíso en medio de la anchura oceánica, tan temiblemente enigmática en esos tiempos, y tener el alto privilegio de verlo antes que nadie desde el carajo y anunciar su gloriosa existencia.

Por eso a Ustedes, periodistas, funcionarios, maestros, científicos, estadistas, presidentes, ministros, jueces, abogados, legisladores… a Usted, Señor banquero, a vos, estudiante… Ustedes, empresarios e inversionistas, obreros, soldados, intelectuales, artistas, operadores bursátiles…lectores del mundo… hágannos el favor… tengan la valentía… tomen el privilegio de irse todos al carajo para ver si salvamos éste mundo en el que navegamos una larga, incierta, torpe y mal planificada travesía a lo desconocido, en medio de la nada… Vean si podemos seguir en paz y sin tantos sobresaltos y, si no hay mas remedio que tenerlos, permítannos estar preparados con algo de anticipación.

 

 

Santa Fe, Argentina. Verano de 2009

 

Oscar Alberto Rey Cardamone